lunes, 22 de febrero de 2010

ORILLA


ORILLAS

Afuera ladra un perro
a una sombra,
a su eco o a la luna
para hacer menos cruel la distancia.

Siempre es para huir que cerramos
una puerta,
es desierto la desnudez que no es promesa

la lejanía
de estar cerca sin tocarse
como bordes de la misma herida.

Adentro no cabe adentro,

no son mis ojos
los que pueden mirarme a los ojos,
son siempre los labios de otro
los que me anuncian mi nombre.

Hugo Mujica, poeta argentino, Bs As, 1942

4 comentarios:

Mondragón de Malatesta dijo...

He tocado, mujer, lo que nadie más ha tocado. Y la puerta jamás se abrió.

Elsa Lucia Paganini dijo...

sin dudas..has tocado en el lugar equivocado....la puerta adecuada tendrà señales......
Un gusto que pases por mi espacio..
hasta pronto

Daniel Diotti dijo...

..va mi rostro que amabas a buscarte/regresa de las noches,enharinado/se mete entre mis
manos,me mira/...yo no quiero mirarlo. D.D.

dicen..que el corazón no se rompe si no es tan duro.

Romek Dubczek dijo...

yo que no entiendo de poesia me ha fascinado, sobre todo el último verso y la frase "como bordes de la misma herida"
ah, vaya, ahora veo que no es tuyo, vaya chasco :(
Romek